Los jóvenes en riesgo de exclusión social tienen más posibilidades de sufrir fracaso escolar: la falta de un acompañamiento personalizado, las limitadas oportunidades y las complejas situaciones sociales que les rodean acaban causando una pérdida de interés hacia la escuela. Por eso nace el programa CROMA 2.0, una iniciativa de la Fundación Autónoma Solidaria (FAS) que tiene como objetivo hacer más alentadora e inspiradora la educación.

Marina Pujadas Farreras, Chiara Gunella y Sarah McDonagh, del grupo de investigación TransMedia Catalonia, han participado con "Una escuela verde para todos", una formación impulsada en el marco del GreenSCENT Project y dirigida a los voluntarios de FAS. Estos voluntarios, estudiantes de la Universidad Autónoma de Barcelona, en los próximos meses conducirán talleres de creación de vídeos sostenibles en 360º y accesibles para todos en diversas escuelas de educación primaria con presencia de alumnado en riesgo de exclusión social.

La formación se llevó a cabo los días 13 y 14 de febrero, y consistió en una parte técnica en cuanto a uso de tecnologías y metodologías audiovisuales y sostenibles, y otra de sensibilización sobre la accesibilidad. Entre otras, se les recordó que acceder a la información es un derecho, y más aun en materia de sostenibilidad, ya que las personas con discapacidad tienen más desventajas frente al cambio climático y son uno de los grupos más vulnerables frente a esta situación. 

Los voluntarios también aprendieron a presentarse y dar la bienvenida en lengua de signos catalana (LSC), y experimentaron en primera persona cómo es la accesibilidad audiovisual para personas con ceguera -a través de unas gafas de simulación de ceguera y de vídeos sin imagen y con audiodescripción-. Este proyecto no ha hecho más que arrancar y continuará hasta finales de primavera.